CCOO y UGT se reparten 1,1 millones de euros anuales del arbitraje laboral
Los sindicatos CCOO y UGT reciben cada año 1,1 millones de euros de dinero público destinado a la resolución de conflictos extrajudiciales en el ámbito laboral. Junto con la patronal integran una fundación que duplica las funciones del Ministerio de Empleo y que sólo logra cerrar con éxito el 26% de los procesos iniciados.
Los dos principales sindicatos de España, CCOO y UGT, reciben cada año 1,1 millones de euros de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para gestionar los procesos de mediación y arbitraje en el ámbito laboral español. Junto con CEOE y Cepyme dirigen la Fundación SIMA, organización que se encarga de resolver los conflictos extrajudiciales con bastante poco éxito, ya que sólo una cuarta parte de los procesos acaban en acuerdo entre las partes.
Según han denunciado fuentes sindicales a Okdiario, esta fundación es en realidad “una herramienta de enjuague a través de la cual CCOO y UGT pactan bajo cuerda con las organizaciones empresariales acuerdos que en muchas ocasiones van en contra de los intereses de los trabajadores”. Por eso la mayoría de los procesos acaban en los juzgados tras la negativa de los afectados a aceptar la resolución.
El SIMA actúa cuando existen conflictos colectivos en el ámbito laboral que afecten a más de una comunidad autónoma. En ese caso, empresarios y trabajadores están obligados a acudir a esta fundación para resolver el problema antes de acudir a la vía judicial. La única forma de no atarse a este organismo es fijar en el convenio colectivo correspondiente, de forma expresa, que no se está dispuesto a someterse a los dictados del SIMA.
Las fuentes consultadas denuncian que “se trata de un sistema cerrado en la que no se puede elegir, ya que los mediadores y árbitros son designados por los sindicatos CCOO y UGT”, sin dejar margen a la entrada de profesionales que no estén dentro del organismo. “De esta forma se garantizan el trabajo y, además, les permite llegar a acuerdos de forma privada sin la presión de los medios de comunicación. Ante la opinión pública se enfrentan pero luego pactan con la excusa de la mediación”.
Además, el organismo duplica las funciones del Ministerio de Empleo, ya que esta labor de acercamiento de las partes para lograr un acuerdo antes de iniciar un proceso judicial “puede realizarse perfectamente desde la Inspección de Trabajo, ahorrando a los contribuyentes el coste de la fundación y limitando el poder de CCOO y UGT en el ámbito de la mediación y el arbitraje”.
En lo que va de año el SIMA ha gestionado 319 mediaciones y ningún arbitraje. Los conflictos solucionados suponen el 26% del total, mientras que el 63% concluye con “total desacuerdo”, según los datos de la fundación. El 4% se archiva y el 7% restante se considera “intentados sin efecto”. Casi una tercera parte de los expedientes tienen que ver con incumplimientos salariales.
Por sectores, las compañías dedicadas a la atención telefónica (call centers) son las que más expedientes proporcionan al SIMA, seguidas de las entidades financieras, las empresas metalúrgicas, las consultoras dedicadas a los estudios de mercado y las aerolíneas.